Antes del paro, PIT-CNT pasará por justicia de Crimen Organizado

37 líderes de distintos sindicatos han sido citados por el escándalo de corrupción de las viviendas sociales.

Antes del paro general, la plana mayor del PIT-CNT deberá pasar por la justicia el 10 de setiembre. 

La justicia penal citó a representantes de 37 sindicatos afiliados a la central obrera por las denuncias de corrupción en el millonario plan de viviendas sociales, informa hoy La República. La denuncia fue realizada originalmente por el líder de la bebida Richard Read -vocero de los sectores moderados-  y el asunto impactó fuerte en el sindicato metalúrgico cuyo líder es el comunista Marcelo Abdala.

Como el PIT-CNT no tiene personería jurídica, el juez actuante decidió realizar la masiva convocatoria a declarar, informó La República.

De todos modos, la Mesa Representativa decidió el último viernes otorgar un poder a su grupo de abogados para que se presenten en representación de todos en la audiencia.

La investigación es de proporciones ya que la inversión esperada era por las viviendas era de 16 millones de dólares.

El paro general nacional de 24 horas dejó paso a un paro parcial de cuatro horas -entre las 9 y las 13 horas- y pese a ello convirtió al PIT-CNT en protagonista de la campaña electoral. Ese día, el PIT-CNT mantendrá su objetivo primordial: dar un apoyo a los logros conseguidos durante los dos gobiernos del Frente Amplio y marcar una posible agenda social para los próximos cuatro años.

Las elecciones serán en dos meses y las encuestas muestran paridad entre los candidatos Tabaré Vázquez y Luis Lacalle Pou. Para la central, una eventual victoria de Lacalle amenaza las conquistas de los trabajadores. Sin embargo, hasta el propio Tabaré Vázquez dijo estar en contra de la medida.

Al mismo tiempo, el sindicalismo uruguayo deberá salir indemne de las acusaciones de corrupción. El programa de viviendas sociales ha sido el más duro golpe para el PIT-CNT junto a la caída del director Alfredo Silva en la Administración de Servicios de Salud del Estado.

En febrero, la denuncia de corrupción en el Plan de Viviendas Sociales (PVS) del PIT-CNT fue objeto de al menos tres denuncias y  dos importantes dirigentes metalúrgicos dejaron de integrar la comisión.

Eduardo Burgos y Ricardo Cajigas renunciaron aunque por motivos diferentes.

La renuncia de Burgos se dio a poco de la denuncia original en febrero, pero recién trascendió en el mes de junio.

Todo comenzó con tres denuncias en contra de gestores del plan social. Estos contratistas - sin autorización oficial y mandatos por gente de la comisión sindical- se habrían apropiado de una cifra importante por contratos de construcción de viviendas sindicales.

En total el proyecto involucraría a 16.500 viviendas en todo el país. Se financia con el aporte de los agremiados al PIT-CNT. Los beneficiarios pagan cuotas bajas (unos 4.000 pesos, trascendió) luego de ocupar.

En la última década, el padrón de afiliados a la central obrera se ha visto triplicado, lo cual mejoró sustancialmente la situación financiera de la institución.La mayoría de las denuncias del PVS involucraron a Burgos, por lo cual se le apartó del cargo.

Fuentes del secretariado de la central sindical dijeron que hay intención de separar el nombre de la institución ante eventuales acusaciones penales contra Burgos.Una de las acusaciones contra el dirigente es que firmó una carta intención a favor de la empresa Vivamax para la construcción de 3.0000 viviendas sin el visto bueno del PIT-CNT.

Esta obra tenía un costo de 3 millones de dólares y a la arquitecta se le pidió -mediante gestores no autorizados- un adelanto del 10% de la inversión en modo de "donaciones". Este acuerdo se había firmado en el mes de febrero de 2013.Después de este primer caso -investigado por Crimen Organizado- aparecieron otros.

El dirigente Cajigas renunció al considerar que Burgos no estaba brindando las garantías para desempeñarse en el Plan de Vivienda Sindical.

La primera de las denuncias fue realizada por el gremialista de la bebida, Richard Read, quien se preguntó por qué el gremio metalúrgico estaba a cargo del plan de viviendas y no el de la construcción.

Para la prensa, la denuncia es consecuencia de las tensiones entre sectores moderados del sindicalismo con los radicales, representados por el gremio metalúrgico, liderado por el comunista Marcelo Abdala.

Luego de esta denuncia,Read y Abdala también se enfrentaron públicamente por un préstamo al PIT-CNT de US$ 660.000 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para la formación de cuadros sindicales. El secretariado del PIT-CNT decidió intervenir la comisión luego de las denuncias.

La central investiga las conexiones de Burgos y los gestores con una cooperativa de crédito social que prestaba dinero a militantes gremiales sin acceso a crédito bancario.

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